19 de abril

Infancias

Desarrollo social
Convivencia

El Centro de Convivencia Barrial La Esperanza celebró sus primeros 18 años

Los festejos incluyeron actividades recreativas y espectáculos, y contaron con la participación de familias, alumnos de escuelas y otros espacios comunitarios del distrito Norte.

Con gran concurrencia de las familias e instituciones barriales se celebró durante la mañana del jueves 16 de junio el 18º aniversario del Centro de Convivencia Barrial (CCB) La Esperanza, ubicado en calle Herrera 2240, distrito Norte.

Los festejos, que incluyeron actividades recreativas y espectáculos, comenzaron a las 10 con juegos y música en el patio del CCB. Al cierre de la celebración chicos y grandes del barrio disfrutaron de un espectáculo de circo en el vecino Playón Barrio La Esperanza.

De la celebración también participaron alumnos de las escuelas Nº 1254 Tomás Espora y Nº 613 Ovidio Lagos, además de los niñas y niños que concurren a los CCB Los Cedros y Nuevo Alberdi.

Los presentes tuvieron la oportunidad de degustar pizzas caseras, alfajorcitos y bizcochuelos que prepararon especialmente las madres que asisten al taller de Ritmo y Baile que se dicta semanalmente en el centro de convivencia.

En la oportunidad, la secretaria de Desarrollo Social, Laura Capilla, detalló que las políticas públicas para niños y niñas es prioridad del municipio y agregó que “es un orgullo para la ciudad que una institución como el Centro de Convivencia Barrial La Esperanza funcione durante 18 años, que siempre está abierto, con propuestas de trabajo para las familias, los niños y los jóvenes".

La funcionaria destacó además que la jornada de festejo “tiene un gran valor, ya que posibilita la integración con otros centros del distrito Norte, que vinieron a compartir, y aportan a la construcción de la integración barrial”, sostuvo Capilla.

Convivencia y participación

Rosa Vallejos es vecina y coordinadora del Centro Recreativo La Esperanza, al que consideró como un espacio al que las madres del barrio pueden llevar a sus hijos con confianza. “El chico es como una plantita chiquita, hay que regarla para que crezca, por eso creo que cuando hay gente responsable por hacer, se pueden lograr muchas cosas y aprovechar el trabajo de las instituciones”, comentó.

Por su parte, Malvina, una joven que participa del taller de cocina, valoró la oportunidad de participar en el centro. “Está bueno porque aprendemos muchas cosas. Yo me siento feliz haciendo esto. Podemos hablar entre nosotras, charlar, sabemos que contamos la una con la otra. Está bueno porque lo que aprendemos a hacer después lo compartimos con nuestra gente". Y agregó: “Este es nuestro lugar”.

Centro Cuidar La Esperanza

HERRERA DR NICOLAS 2240

4806630