Mejor prevenir que curar: cómo evitar la aparición del mosquito transmisor de dengue
El calor, la lluvia de primavera y la humedad generan el clima ideal para la reproducción del aedes aegypti. Para combatirlo es fundamental eliminar recipientes que acumulen agua en los hogares.
Con la llegada de la primavera y a medida que la temperatura se empieza a elevar, es necesario comenzar las tareas preventivas para evitar la reproducción del mosquito transmisor del dengue: el aedes aegypti.
El mosquito suele aparecer en esta época del año, cuando el frío desaparece, por lo que resulta fundamental el inicio temprano de las acciones para combatirlo y evitar su proliferación.
Cabe remarcar que la transmisión del dengue sólo se produce por la picadura de mosquitos infectados, no se transmite de persona a persona, a través de los animales, ni de objetos. Así, sin mosquito no hay enfermedad.
En ese sentido, desde la Municipalidad de Rosario se recuerdan una serie de recomendaciones a tener en cuenta para evitar la aparición del mosquito vector.
¿Cómo prevenir la aparición del mosquito?
Lo principal es no dejarle lugar donde pueda poner sus huevos y reproducirse. Para esto es importante eliminar todos los reservorios de agua y mantener limpios y cubiertos los lugares donde pueda acumularse. Se trata de prácticas que hay que sostener durante todo el año, y reforzar e incrementar luego de las lluvias.
- Baldes, regaderas, botellas vacías, latas y cualquier otro recipiente donde podría acumularse agua deben ser vaciados, limpiados (en especial cepillar bordes) y puestos boca abajo.
- Piletas, tanques de agua, bachas al aire libre, neumáticos en desuso y otros posibles contenedores tienen que permanecer tapados para evitar que se junte agua.
- Los bebederos de animales y otros espacios de agua limpia, tienen que cepillarse diariamente y renovar el agua.
Cualquier espacio, por más pequeño e inusual que sea, donde se acumule agua, se convierte en un criadero para el mosquito aedes aegyptis.
¿Por qué es importante el descacharrado?
Los huevos del mosquito transmisor no se destruyen por fumigación, ni cloración, ni disecación. Cuando las temperaturas son bajas y la humedad no es la adecuada, el huevo puede sobrevivir por más de 7 meses en estado latente. Además, si la hembra está infectada, puede transmitir la carga viral al huevo, naciendo, de una temporada a otra, mosquitos infectados.
En este sentido, el descacharrado y limpieza de recipientes, tanto en el interior de las casas como en sus alrededores, es una de las formas más efectivas para eliminar larvas y prevenir la reproducción del vector, porque permite la eliminación de los posibles criaderos para que no haya mosquitos adultos.
Acciones hasta julio
Desde la Municipalidad de Rosario se llevaron a cabo diferentes acciones para prevenir la circulación de la enfermedad en la ciudad entre diciembre del año pasado y el mes de julio, período en el que el mosquito suele estar más presente y el contagio se puede propagar.
Desde las áreas sanitarias se realizaron seguimientos epidemiológicos de los casos confirmados, realizando visitas y re-visitas acordadas con las personas para conocer su estado de salud, el de sus familiares y convivientes. Además, se indicó la utilización de repelente en estos casos y se hizo un acompañamiento a las familias en las tareas de descacharrado.
Estas acciones fueron acompañadas por los operativos para prevenir y combatir el dengue en los seis distritos de la ciudad. A su vez, se realizó descacharrado, bloqueos sanitarios en zonas donde se registraron mayor cantidad de contagios, se entregó repelente, vaporizadores y 6.000 rociadores con productos como Depe para que los vecinos puedan autofumigar el interior de sus domicilios. Además, se intensificaron los operativos de limpieza de zanjas y cortes de yuyos en vía pública y espacios verdes y se reforzó el servicio de residuos grandes.
Cabe recordar que la Municipalidad dispone de cuatro equipos de termoniebla para fumigación en vía pública y de cuatro nuevas motomochilas (incorporadas en abril de este año) que permiten la fumigación en sitios de difícil acceso, como pasillos en zonas de asentamientos irregulares.
Los trabajos de fumigación con termoniebla se realizaron en doble turno durante los meses críticos, abarcando así más cantidad de sectores en menor tiempo.