Nuevo Alberdi: culminó una nueva edición de la propuesta cultural itinerante para niñas y niños

En el marco del programa Rosario cuida a sus barrios y de la intervención integral que el municipio viene sostiendo en barrio Nuevo Alberdi, el pasado viernes 16 de julio culminó la segunda edición del ciclo de talleres para niñas y niños «Habitar el tiempo». El cierre incluyó una muestra de actividades en el predio de Pozos y Baigorria y una visita de las chicas y los chicos a la Granja de la Infancia. 

"«Habitar el tiempo» es una propuesta que busca fortalecer los vínculos familiares, comunitarios y el cuidado de las infancias. Se desarrolló de forma itinerante para ir abarcando diferentes puntos del barrio elegidos estratégicamente en función de poder trabajar la problemática de la violencia que atraviesa al barrio", explicó Vanina Leone, coordinadora del Programa Rosario cuida a sus barrios. Cabe recordar que el ciclo de talleres tuvo su primera edición durante el verano, en la plaza de Bouchard y Álvarez. 

El viernes las y los chicos de Nuevo Alberdi vivieron un día fuera de lo común y pudieron adentrarse en el vasto predio de La Granja de la Infancia, adonde llegaron junto a algunos de sus familiares y a miembros de equipos municipales que participan de la experiencia. Durante la jornada corrieron, jugaron al aire libre, se encontraron con vacas, ovejas, chivos, caballos, y se maravillaron buscando tortugas y patos en los laguitos del lugar, a la par que pudieron poner manos a la obra y armar cestos de mimbre en forma artesanal.

Nadia, mamá de Marcos, Alma, Kimey y Ciro, expresó su alegría por el paseo que realizaron. “Los chicos lo disfrutaron al máximo y para mí fue un placer tener la oportunidad de acompañarlos”, comentó, y agregó, asombrada y sonriendo: “Aprendimos que la vaca no tiene dientes arriba”.

Por su parte, Érica, mamá de Benjamín y Milena, relató la forma en que sus hijos se fueron apropiando de la propuesta que el Municipio acercó a sus hogares: “Benjamín y Milena empezaron a venir a dibujar y se empezaron a entusiasmar, querían venir todos los viernes, se levantaban para estar puntual y me empezaron a entusiasmar a mí”.

La mujer mencionó, además, que Milena empezó a expresarse a través del dibujo y la pintura gracias a esta propuesta que, según sus palabras, “tomó como una escuelita”. En tanto Benjamín, que era “muy hiperactivo”, tras empezar a concurrir a los talleres y de acuerdo a lo que pudo percibir su mamá, “se empezó a tranquilizar”. Así, en relación al ciclo de talleres, Érica aseguró: “Con ellos dos a mí me ayudó un montón”.

Por otro lado, como cierre de la jornada y de la propuesta, en el predio de Pozos y Baigorria, las y los chicos que se sumaron al ciclo de talleres vieron exhibidas sus producciones plásticas, una serie de fotos que registraron la experiencia vivida, y recibieron un reconocimiento individual por haber participado de las actividades.

En la ocasión, el secretario de Desarrollo Humano y Hábitat, Nicolás Gianelloni, hizo referencia al lugar central que las infancias tienen para la gestión municipal. “Las niñas y los niños son lo más importante para nosotros, por eso agradecemos a las mamás el apoyo, porque sin el acompañamiento de las familias no podrían sumarse a estas actividades”, remarcó.

En relación al programa Rosario cuida a sus barrios y la intervención integral en Nuevo Alberdi, el funcionario expresó: “El programa que estamos desarrollando tiene que ver con la idea de que entre todos cuidamos a nuestros barrios y Nuevo Alberdi es un lugar que queremos cuidar especialmente, por lo cual, seguramente nos vamos a seguir encontrando”.

«Habitar el tiempo» durante la pandemia

La primera edición de la propuesta se desarrolló en el verano en la plaza de Bouchard y Alvares, y la segunda, que acaba de finalizar, en el predio de Pozos y Baigorria. La coordinadora del programa Rosario cuida a sus barrios anunció que se está preparando una tercera intervención que se localizará en la denominada Zona rural de Nuevo Alberdi.

La idea fue itinerar el dispositivo para trabajar con diferentes grupos de familias, de niñas y niñas del barrio, respetando los protocolos sanitarios. En esta ocasión, «Habitar el tiempo» adoptó un formato bimodal, ya que constó de 10 jornadas que iniciaron en mayo y finalizaron el 16 de julio. Durante el período de recrudecimiento de la pandemia, hubo tres jornadas que constaron de un acercamiento puerta a puerta a los domicilios familiares para alcanzar materiales didácticos y expresivos para que niños y niñas pudieran hacer actividades en casa -parte de esas producciones se exhibieron en la muestra de cierre-.

Las otras siete jornadas fueron presenciales con propuestas en pequeñas grupalidades desarrolladas en el predio de Pozos y Baigorria. Hubo talleres de producción de plantines, de dibujo y pintura, de promoción de la salud, actividades deportivas, entre otras. Tal como se hizo en la primera edición, hubo un día de paseo y reconocimiento de las instituciones del barrio, en el que niñas y niños pudieron conocer el centro de convivencia barrial, el centro de salud y la huerta que sostienen jóvenes del programa Nueva Oportunidad.

Leone destacó la importancia de que el dispositivo permitiera sostener el vínculo con las familias durante la pandemia, gracias al acercamiento que se desplegó casa por casa. Asimismo, valoró la resignificación que la propuesta produce en relación a espacios públicos del barrio. “Este era un predio que los vecinos usaban como canchita, lo que nos interesaba era generar otra forma de apropiación del espacio público por parte de la comunidad a través del desarrollo de este dispositivo lúdico y recreativo destinado a las infancias del barrio”, dijo.

«Habitar el tiempo» es una propuesta transversal del Municipio puesta en marcha por el programa Rosario cuida a sus barrios de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, junto a las secretarías de Cultura y Educación, Salud Pública y Deporte y Turismo, y del Centro Municipal Distrito Norte Villa Hortensia.