Culminó el Festival Fontanarrosa con múltiples actividades y homenajes a lo largo de cinco días
Desde el 22 de noviembre la propuesta incluyó exposiciones, conciertos, charlas y presentaciones literarias que llegaron a masivos públicos. El cierre fue este martes 26 en el mítico bar El Cairo
La ciudad se vistió de fiesta para rendir homenaje a uno de sus hijos más ilustres: Roberto Fontanarrosa. Durante cinco días, la risa, la emoción y la nostalgia se entrelazaron para celebrar la vida y obra del querido "Negro".
El Bar El Cairo, ámbito de inspiración para muchas de los cuentos de Fontanarrosa y cuna de “La Mesa de los Galanes”, fue el escenario del epílogo, este martes 26 de noviembre, en el 80 aniversario de su natalicio. La presentación del libro "Desde el Cairo", con edición a cargo de Horacio Vargas, contó con la presencia del intendente Pablo Javkin y destacados referentes de distintos ámbitos como Miguel Angel Russo, Pablo Feldman, Pitufo Fernández, Negro Centurión, Rodolfo Perassi, Marcelo Scalona, Melina Torres y Patricia Dibert, Colo Vásquez, Chelo Molina y Chiquito Martorell.
"Desde el Cairo” fue el nombre de una sección semanal que Roberto Fontanarrosa escribió en el diario Rosario/12, que hacía alusión al célebre bar de la ciudad y que este libro se ocupa de rescatar.
El secretario de Cultura y Educación, Federico Valentini, reiteró que el objetivo del festival fue "recuperar el espíritu de Fontanarrosa, encontrarse con amigos, disfrutar, ocupar el espacio público". Valentini destacó la importancia de retomar esa esencia vinculada a la simpleza que caracterizó al Negro, y remarcó que el festival tuvo un balance más que positivo. Según el secretario, "la presencia de Joan Manuel Serrat y la gran convocatoria demuestran que Rosario está viva y que la cultura sigue siendo un motor de unión".
Al cabo de las múltiples propuestas desarrolladas se estimó que las actividades del Festival Fontanarrosa convocaron a 30 mil personas como público presencial y 500.000 espectadores siguiendo distintas instancias del evento por la transmisión en más de 10 países.
El corazón del festival fue el Cultural Fontanarrosa, sede de una serie de exposiciones que sumergieron al público en el universo creativo del escritor. La muestra que llevó adelante Dante Taparelli, "Mendietas y otras posibilidades", reunió a reconocidos ilustradores que rindieron homenaje al icónico personaje de historieta, mientras que en el segundo piso, "Fontanarrosa te lo cuenta" ofreció un recorrido gráfico y literario por su obra.
Pero el festival no se limitó al centro cultural. Las calles de Rosario se llenaron de vida con el Circuito Fontanarrosa, que invitó a los y las visitantes a recorrer bares y locales emblemáticos de la ciudad, donde se organizaron charlas, lecturas y presentaciones musicales.
Uno de los momentos más destacados del festival fue la visita de Joan Manuel Serrat, entrañable amigo de Fontanarrosa. En una charla íntima con Eduardo Sacheri en el teatro El Círculo, el cantautor español compartió anécdotas y reflexiones sobre su relación con el escritor rosarino y conmovió al público presente. A través de 11 tópicos a modo de plantel futbolístico, Serrat, con su habitual sencillez y calidez, destacó la fidelidad de Fontanarrosa a su ciudad y la admiración que sentía por él.
La música también tuvo un papel protagónico en el festival. El concierto inaugural, con la participación de Jairo y Raúl Lavié, entre otros artistas locales, posibilitó que los sentidos estuvieran abiertos a la recepción de las distintas emociones. El Ensamble Municipal de Vientos interpretó canciones populares vinculadas a la historia y obra de Fontanarrosa.
Más allá de las actividades programadas, el festival generó un ambiente de celebración en la ciudad que trascendió las fronteras de los espacios físicos y se convirtió en un punto de encuentro para amantes de la literatura, el humor y la cultura en general, que se reunieron para recordar y homenajear a uno de los grandes referentes del humor, la ilustración y la literatura nacional.
A través de sus diversas actividades, el festival logró transmitir el legado del Negro a nuevas generaciones, asegurando que su obra siga vigente e inspirando a millones de personas no sólo en Rosario sino en todo el mundo.