Fenómeno El Niño: el Comité de Emergencia expuso balance de las acciones preventivas

En una reunión convocada en el Palacio Municipal en la mañana del miércoles 10 de agosto, representantes de distintas áreas municipales mantuvieron un encuentro de trabajo para trazar un balance de las acciones que ha venido desarrollando el Comité de Emergencia Central desde que en septiembre de 2015 el municipio anunciara un vasto conjunto de acciones preventivas por el fenómeno de El Niño, anticipándose de esta manera a las tormentas y persistentes precipitaciones que luego se registraron en la ciudad. Convocados por la Junta Municipal de Defensa Civil, funcionarios, concejales y equipos técnicos de diversas áreas coordinaron este plan.

El subdirector de Defensa Civil, Gonzalo Ratner, precisó que el Comité de Emergencia Central “comenzó como un equipo chico, con áreas técnicas como Hidráulica, Defensa Civil, las áreas de Servicios Urbanos (cuadrillas descentralizadas que dependen de cada centro municipal de distrito), Salud y Promoción Social, y fue creciendo, se fueron sumando actores. Hoy en día lo abarcan todas las secretarías de la ciudad, todas tienen un referente dentro de este organismo, y desde aquí se trabajan todas las problemáticas que tienen que ver con el riesgo, tanto de emergencias como en desastres en Rosario”.

A casi un año del comienzo del trabajo preventivo por el fenómeno de El Niño, el balance que formularon es altamente positivo. “El objetivo de esta reunión fue de algún modo hacer este balance. Hoy tenemos bien claro que la situación de Rosario, si bien no tuvo evacuados, no es a causa de la fortuna, o a que el fenómeno de El Niño no nos haya golpeado fuerte, fue todo el trabajo previo”, evaluó Ratner y sumó que “Rosario estuvo 57 días por encima del nivel de evacuación; en cuanto a la altura del río, estuvo más de 100 días por sobre el nivel de alerta y no hubo evacuados por todo el trabajo previo en terreno, como defensas y reubicación de familias cuyas viviendas estaban en zonas vulnerables que llevaron a este resultado”.

Con todo, “hubo protocolos que no llegaron a implementarse”, refirió el funcionario y puso como ejemplo lo dicho por el director General de Parques y Paseos, Nicolás Cordero, quien destacó la situación en los posibles centros de evacuados. “Se preveían hasta 5 mil evacuados en un escenario de máxima, no hubo uno. De todos modos, los lugares se prepararon y hasta hubo un protocolo que incluía el despeje del arbolado en los lugares de acceso a los centros de evacuados, para evitar problemas ante la ocurrencia de una emergencia y que se pudiera llegar sin problemas al lugar”, añadió.

El foco en La Niña

“Las reuniones del Comité son semanales y ahora ponemos el foco en el fenómeno de La Niña”, apuntó Ratner y agregó que este efecto climático “no va a generar mayores consecuencias en la ciudad, porque habla de lluvias por debajo de lo normal, pero debemos seguir trabajando fuerte en seguir concientizando, esto no quiere decir que no se produzca una tormenta fuerte o lluvias fuertes en la ciudad. No queremos generar una falsa sensación de seguridad”.

Cómo ocurrió con El Niño, se continuarán desarrollando trabajos en el territorio “con todas las áreas del COEM, casa por casa en lugares donde se puedan producir complicaciones, llevando el mensaje sobre cuáles son los puntos de referencia en cada barrio, donde los vecinos recibirán atención y donde llegará la ayuda para acompañar las tareas de rutina que se realizan, como limpieza de canales, de desagües pluviales y trabajar fuerte con el tema higiene, sobre todo en lugares vulnerables”, sostuvo el subdirector de Defensa Civil.

El mapa de riesgos y los desagües

En la previa de El Niño, el municipio identificó los lugares que podrían resultar más afectados y los vecinos recibieron un folleto con la zona involucrada, el punto de información al cual deben recurrir ante emergencias, un pedido para que se colabore con la limpieza de los espacios comunes y los teléfonos de emergencias.

Por su parte, técnicos de la Dirección de Hidráulica mencionaron el correcto funcionamiento de las obras de saneamiento y drenajes ejecutadas en la vasta zona de influencia, y a modo de ejemplo citaron la construcción del Aliviador III, que frente a la lluvia más intensa respondió muy bien, aún sin estar la obra concluida en su totalidad.

También en el encuentro se abordó el tema del dengue, que tuvo su pico en el verano pero cuya labor preventiva continuó todo el año con actividades planificadas en general y con los denominados días D donde el municipio sale a redoblar la campaña para promover la concientización de la población respecto a este tema y profundizar el descacharrado: “Aún en esta época para evitar la enfermedad es fundamental la eliminación de posibles criaderos del mosquito, tenemos que seguir trabajando en el invierno para evitar la llegada del dengue en verano”, remarcó un referente de Salud.

En este sentido cabe señalar que el secretario de Salud Pública tuvo oportunidad de exponer el caso Rosario en la reciente reunión del Consejo Federal de Salud, donde se destacó que es la única ciudad que mantiene políticas activas de prevención. Además, Leonardo Caruana brindó un informe pormenorizado de la situación del zika y chikungunya y expuso que recientemente se presentó un programa destinado a viajeros para difundir y promover medidas de prevención a fin de evitar la circulación de enfermedades vinculadas al aedes aegyptis.

Lo que viene: nuevos simulacros de emergencias

Por otra parte, Ratner también anticipó que el 17 de agosto se realizará “un simulacro de incendio con evacuación de víctimas en una confitería bailable de la zona de la Estación Fluvial, el primero de una serie de ensayos que se programaron de acá a fin de año; otros serán en el río con accidente de embarcaciones, un derrumbe, en el aeropuerto con la caída de un avión y en el puente Rosario-Victoria con un accidente múltiple”, enumeró.

Todo ello tiene como efecto poner a prueba en forma periódica los protocolos que establecen precisas competencias y funciones de los distintos actores convocados en cada caso, como bomberos, SIES, Prefectura, Defensa Civil, rescatistas, voluntarios y otros, para actuar ante la emergencia y evaluar los mecanismos de coordinación entre los mismos a fin de agilizar y optimizar la capacidad de respuesta en cada caso particular.