La ciudad celebra un nuevo aniversario del Día del Juego y la Convivencia
Rosario se prepara para una jornada especial que invita a jugar, más allá de la edad y del lugar. Se trata de una tradición nacida de la propuesta de niñas y niños hace 27 años.
El municipio celebra el 1° de octubre el Día del Juego y la Convivencia, una fecha que convoca a toda la ciudadanía a unirse a una iniciativa que se originó en la visión de las infancias locales. Como cada primer miércoles de octubre, la consigna es clara y contundente: «Aquí... allá... donde estemos, juguemos». Este 2025, la conmemoración adquiere un significado especial al coincidir con el inicio de los festejos por el Tricentenario de la ciudad.
La celebración se remonta a 1998, cuando el primer Consejo de Niñas y Niños propuso al Concejo Municipal declarar Día del Juego y la Convivencia el primer miércoles hábil de octubre, iniciativa que fue oficializada a través de la Ordenanza 6581/98. La fecha fue elegida a pedido de las propias chicas y chicos, para que cayera a mitad de semana y en pleno clima de primavera, ideal para jugar de manera colectiva y en toda la ciudad.
El juego como motor de cambio
La invitación de la jornada es para que todas las personas se tomen un tiempo para jugar, sin importar la edad, el lugar o con quién estén. La celebración se extiende a todos los ámbitos de la vida diaria: casa, trabajo, escuela, club, en familia, con compañera/os o incluso con desconocida/os. Se trata de una oportunidad para conectar con las pequeñas cosas que le dan sentido al cotidiano a través de la alegría y la espontaneidad del juego, ya que, como recuerdan las primeras consejeras y consejeros: 'Jugar es cosa seria'.
Para que el espíritu de la fecha se haga realidad no se necesitan grandes preparativos ni eventos masivos. La invitación es a lo simple: basta con tomarse un breve recreo del día para un juego de cartas, recordar una payana, tutti frutti, saltar el elástico, o dibujar una rayuela en el piso.
El Día del Juego y la Convivencia es un recordatorio del derecho de las niñas y los niños a jugar de forma autónoma todos los días. La celebración va más allá de un simple festejo, promueve el juego como una forma de convivencia y un ejercicio de la democracia, y demuestra, a través de la praxis, que de momentos divertidos se pueden generar transformaciones significativas.
El proyecto La Ciudad de las Niñas y los Niños, del que surgió esta celebración, fue incorporado en la agenda de políticas públicas de Rosario en 1996 tras la visita a Rosario del pedagogo italiano Francesco Tonucci. Su visión de una ciudad segura y vivible para niñas y niños, que a su vez sería mejor para todas y todos los ciudadanos, sigue siendo la inspiración para esta y otras iniciativas.
La celebración, que se realiza anualmente cada primer miércoles de octubre por iniciativa del primer Consejo de Niños y Niñas de Rosario, promete ser un espacio de encuentro y diversión desde la mañana hasta la tarde.
Propuestas
La jornada estará llena de magia y risas con dos espectáculos diseñados para toda la familia en diferentes momentos del día.
Por la mañana, a las 10:30, Martín Cuentos y Canciones se presentará en el jardín de Embarcaderos. Este proyecto artístico-cultural rosarino, dirigido por Martín Vivas, ofrecerá un show que fusiona música, cuentos y juegos para encender la imaginación.
Por la tarde, a las 15, la cita es con el humor y la música de Esterlicia y Oblicuo. Este dúo de clown (conformado por Ana Gassa y Lucas Cristofaro) brindará un espectáculo interactivo con canciones de autoría propia, títeres, poesía y personajes delirantes. Será un momento mágico para bailar, reír y compartir. Además, el dúo realizará intervenciones especiales referidas al proyecto 'Habitar el Tiempo' (Consejo de Niñas y Niños 2018).
Si bien estas actividades tendrán lugar en Estación Embarcaderos (Vélez Sarsfield 164) se invita a toda la comunidad a sumarse, desde dónde esté y cualquiera sea la edad, a esta tradición rosarina que celebra el juego como un derecho fundamental y una poderosa herramienta de convivencia.