Otros cien rosarinos aprendieron a leer y escribir con el programa Yo, Sí Puedo

La intendenta Mónica Fein participó el miércoles 30 de noviembre del acto de entrega de certificados a los egresados del Yo, Sí Puedo, programa que se enmarca en el Plan de Alfabetización Municipal. En esta oportunidad, se graduaron 104 participantes, quienes recibieron sus diplomas, y se distinguió también a los facilitadores voluntarios que desarrollaron y acompañaron a los grupos en el proceso de alfabetización.

Durante el encuentro, que se realizó en el Centro Municipal Distrito Rosa Ziperovich (Uriburu 637), Fein felicitó a los egresados, a los facilitadores y a las organizaciones sociales e instituciones que brindaron su espacio y tiempo para que se pudiera concretar el programa. Además, evocó la figura del recientemente fallecido Fidel Castro, ex presidente y líder político de Cuba, país de donde es originario el plan de alfabetización: "Todo el pueblo latinoamericano y, por supuesto, el pueblo comprometido del mundo está en un momento difícil y estamos pasando por un momento de dolor", expresó.

"Qué mejor homenaje a un hombre que vivió con ideales de hacer un mundo mejor, donde todos seamos iguales, que reunirnos aquí a entregar estos diplomas a tantos hombred y mujeres que han hecho tanto esfuerzo", señaló la jefa municipal y añadió que "son muchas las tareas que él nos ha dejado pendiente, pero también muchas las herramientas, como el Yo, Sí Puedo", 

Por otro lado, la mandataria destacó que "saber leer y escribir es una herramienta más para luchar contra las injusticias, para avanzar en el camino de la vida; es una herramienta fundamental para que no nos digan lo que tenemos que hacer y poder decidir nosotros". Asimismo, tomó el compromiso de Jorge Padrón, encargado de supervisar el programa cubano en Argentina, de tiplicar para el año próximo la cantidad de alfabetizados. 

A su turno, Padrón también hizo alusión al fallecimiento del líder cubano: "Es un día triste para América y para el mundo también", dijo el pedagogo cubano y desató los aplausos del auditorio entero. "Cada acto de graduación del programa era una enorme alegría que él sentía", aseguró y mencionó que "esto es un acto también recordando a Fidel, agradezco enormemente esa muestra de respeto y cariñó por Cuba y por el Comandante". 

Por otra parte, indicó que "estamos convencidos que para 2017 se van a triplicar las cifras de graduados, porque hay un compromiso y una voluntad política de la intendenta. Estamos convencidos de que el año que viene va a ser un año de muchos éxtios, porque tendremos además de la voluntad política, el espíritu y la figura de Fidel". 

Los grupos de trabajo se distribuyeron en 23 espacios -entre municipales y provinciales y de organizaciones de la sociedad civil- en diferentes barrios de los distritos Oeste, Sur, Sudoeste y Noroeste, entre ellos Cristalería, Empalme, Pichincha, Las Flores, Belgrano, Sarmiento, Zona Cero, Villa Banana, Ludueña, Mangrullo y Saladillo.

Asimismo, el Plan se lleva a cabo en casas de familia y en diferentes organizaciones, instituciones, mesas  de encuentro barrial y dependencias municipales, entre ellas: Centro Integrador Comunitario Oeste, Dirección de Educación Municipal, Planta de Transferencia Bella Vista, Centro Cultural El Gomecito, Centro de Convivencia Barrial Nº 6, Fundación Segunda Etapa, Capilla Santa Rita, Asociación Civil Hoprome, Iglesia Renovación y Hogar Padre Misericordioso.

También estuvieron presentes autoridades de la Dirección de Eucación Municipal, la Fundación Un mundo mejor es posible (Ummep) y de distintas organizaciones sociales. 

Programa Yo, Sí Puedo

El Yo, Sí Puedo es un método de lecto-escritura de origen cubano que el municipio y organizaciones locales impulsan en Rosario. Se lleva a cabo gracias a la participación de facilitadores, quienes ofrecen su tiempo y dedicación en forma voluntaria, para enseñar a leer y escribir. El acceso a este programa es voluntario y se brinda capacitación a facilitadores que deseen acceder al mismo.

Es un método accesible, entretenido, divertido y breve, ya que la fase de lecto-escritura dura 3 meses. Se realiza en lugares cercanos al domicilio de los participantes, las clases están grabadas en video y se emiten a través de un televisor, haciendo efectiva la incorporación de los conocimientos.

Los encuentros se complementan con la ayuda de una cartilla y la presencia del facilitador.