Más de 300 instituciones se sumaron a definir políticas y obras a futuro
La Municipalidad de Rosario trabajó con representantes de la cultura, la producción, la salud, el turismo, el trabajo y Pueblos Originarios en el Plan Estratégico Rosario 2030.
En 2017 la Municipalidad de Rosario trabajó con representantes de la cultura, la producción, la salud, el turismo, el trabajo, con jóvenes, adultos mayores, Pueblos Originarios y mujeres de los 6 distritos en el Plan Estratégico Rosario 2030.
El debate, las críticas y los principios de acuerdos, tanto en lo público como en lo privado, recuperaron las necesidades y sueños de la ciudadanía que por tercera vez en la historia de la ciudad participa del diseño de políticas y obras de Rosario.
Estos encuentros servirán como base del plan estratégico que se presentará en 2018. “La ciudadanía reclama a Rosario como espacio integrado y cohesionado en todos los aspectos. Quieren desterrar la idea de que existen varias ciudades. La ciudad supo sobreponer obstáculos importantes desde la cohesión y es lo que intentaremos continuar a partir de acuerdos”, explicó el director de Planificación Estratégica, Roberto Zampani.
Visiones
En la tradición de los anteriores planes estratégicos de 1998 y 2008, el municipio cerró un año de ininterrumpido trabajo, donde involucró a 339 instituciones de la ciudad en el diseño de políticas y proyectos para 2030. La dirección de Planificación Estratégica, que depende de la Secretaría de Planeamiento, convocó y organizó talleres, encuentros y sumó el espacio de consulta en foros organizados por el municipio.
Tendió canales de comunicación con las instituciones y vecinos y vecinas para que sumen opiniones e iniciativas a través de la página web del municipio. De los debates surgieron visiones y proyectos sectoriales que servirán a los funcionarios y representantes de las instituciones como guía y agenda común.
En materia cultural la visión recuperada incluyó la profundización de la descentralización y la integración en los barrios. “Queremos una Rosario integrada no sólo en lo territorial sino entre generaciones. Queremos una ciudad de la paz, una ciudad educadora y participativa”, sintetizaron las instituciones.
Respecto a la producción, la agenda de las empresas y especialistas se centró en asistir a las pymes locales, aumentar la infraestructura de cargas y logística de la ciudad, y promover los centros comerciales barriales, entre otros objetivos. “Trabajamos para construir una ciudad que integra pymes, cooperativas y grandes empresas; que respeta el ambiente, incorpora tecnología y se pone a la vanguardia con empleos inclusivos y de calidad”, señalaron como resultado del taller en el que participaron más de 30 instituciones del ámbito de la producción.
Cuando las instituciones dialogaron sobre el hábitat y el medio ambiente, entendieron que el próximo plan estratégico deberán avanzar en proyectos que prioricen la sustentabilidad, definan nuevos usos a las tierras públicas, resuelvan el entramado ferroviario y desarrollen acciones concretas contra el cambio climático.
“La ciudad tiene que tener una escala humana, con igualdad de oportunidades de acceso, tránsito y servicios en los barrios. Debe renovar su Plan Ambiental y generar una mejor convivencia”, resumieron en un escrito.
Entre los puntos más importantes de la infraestructura y la movilidad del futuro más de 50 instituciones y funcionarios del municipio y la provincia acordaron que será necesario regular el transporte por agua y aire, y resolver con el gobiernonacional la función de los trenes que atraviesan la ciudad como parte de la renovación del Plan de Movilidad. “La ciudad tiene que tener una infraestructura para la vida y el trabajo que se renueva. Debe participar del debate por una movilidad más sustentable”, indicaron.
Siglo XXI
Entre las novedades del plan estratégico la consulta alcanzó por primera vez a las comunidades locales de Pueblos Originarios. Surgieron propuestas concretas como identificar monumentos, parques, calles y edificios con nombres en las distintas lenguas originarias, y más importante, crear una institución encargada de promover la cosmovisión de los pueblos que viven en la ciudad.
“Rosario debe ser una ciudad que respete la diversidad cultural, el ambiente y su río; una ciudad que respete su pasado, sus raíces y su historia local; un espacio que garantice el derecho a ser diferente”, explicaron los representantes coya, qom y mapuche.
Otra de las consultas que se sumaron por primera vez a los diseños de políticas estratégicas fue la voz de las mujeres organizadas en más de 15 agrupaciones que trabajan en los barrios como La Corriente Mujeres FFV, Enredar Mujeres, la asociación Mujeres Sin Daños, Mujeres de Negro, la Red Mujeres del Sur, entre otras.
El plan sumó las opiniones de cientos de chicas y chicos durante la Semana de la Juventud y de ciudadanos que participaron del primer congreso de Adultos Mayores.
Proyectos a futuro
Junto a la intendenta Mónica Fein, la Dirección de Planificación Estratégica trabajó en jornadas específicas con representantes destacados de la salud, el deporte y el turismo para acordar proyectos a futuro. Los deportistas olímpicos y paraolímpicos se comprometieron a trabajar en el desarrollo, mantenimiento y gestión de un centro para el entrenamiento y alojamiento de federaciones, marcas y atletas de todas partes del mundo.
Además de impulsar el deporte adaptado, pidieron avanzar en un programa público privado que incluya a los clubes de la ciudad y sume a los jóvenes a las prácticas de jockey, rugby y tenis.
Los representantes de la salud y la ciencia debatieron y llegaron a la conclusión de que deben crear un nuevo centro de salud de alta complejidad para la zona sur que tenga un espacio de formación.También avanzaron en la idea de un sistema integrado de banco de tejidos, lavadero centralizado y servicios de catering.
En materia de turismo, los representantes del Estado y las empresas avanzaron en la idea de que Rosario se vuelva puerto base para un circuito de cruceros que conecte con los sistemas hídricos de los Esteros del Iberá y, al sur, con el delta del Río de la Plata. Además, que pueda mejorar accesos a las terminales aéreas y terrestres para ampliar la operatoria. “Rosario debe ser una ciudad integrada a los circuitos turísticos nacionales y regionales, ligados a la cultura y la educación”, coincidieron.