27 de noviembre

Intendencia

Mónica Fein inauguró destacada muestra del pintor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín

Su obra "estuvo en los museos más importantes del mundo, pero la presencia de esta muestra aquí tiene una significación más poderosa y sentimental", expresó Pablo, hijo del emblemático artista

Con la presencia de la intendenta Mónica Fein, funcionarios y personalidades de distintos países de Latinoamérica, se inauguró este viernes 15 de junio en el Museo de la Memoria (Córdoba 2019) la muestra De la inocencia a la ternura, del emblemático pintor, muralista y escultor ecuatoriano Oswaldo Guayasamín. La exposición forma parte de la programación por el 90° aniversario del nacimiento de Ernesto "Che" Guevara.

“Cuando visitamos la Casa del artista en Quito, dedicada a Guayasamín, empezamos a soñar y a imaginar aquella muestra en Rosario”, recordó Mónica Fein acompañada por los secretarios de Gobierno, Gustavo Leone, y de Cultura, Guillermo Ríos,  y la directora del Museo de la Memoria, Viviana Nardoni. 

"Este es el lugar exacto y el mejor momento para esta muestra, en el marco del homenaje al Che en su 90 aniversario, uniendo a estas dos personas que se conocieron, que soñaron juntos y seguro habrán conversado del mundo que deseaban, nosotros somos testigos de ese encuentro", añadió Fein. 

En tanto la directora del Museo, Viviana Nardoni, destacó que " la institución está orgullosa y honrada de mostrar esta obra de gran valor histórico y político". De este modo, la funcionaria afirmó que en el contexto nacional "de recorte de derechos y de esperanzas, nosotros nos reafirmamos en nuestras políticas públicas de memoria verdad y justicia desde este museo, y desde la ciudad, con el arte como mensajero de estos valores". 

A la inauguración de la muestra asistieron los embajadores en la Argentina de Cuba, Orestes Perez Pérez, y el de Ecuador, Fernando Yépez. También participaron los hermanos del Che, Celia, Juan Martín, Ramiro y Victoria Guevara; y Antonio Guerrero Rodríguez, uno de "los Cinco" héroes cubanos que estuvieron presos en cárceles de Estados Unidos.

"La obra de Guayasamín estuvo en los museos más importantes del mundo, pero la presencia de esta muestra aquí tiene una significación más poderosa y sentimental, porque está uniendo su pensamiento con el de los humildes, los desposeídos, por quienes mí padre luchó y la revolución cubana luchó, para subsistir en este planeta", sostuvo por su parte Pablo Guayasamín, hijo del artista ecuatoriano. "Les doy un gracias inmenso por abrirnos las puertas, desde hoy la ciudad de Rosario tendrá en una sala de exposición a un baluarte de lucha", añadió.

La exposición muestra lo más representativo de la pintura de Guayasamín, quien a través de su pintura da cuenta de la riqueza cultural de los pueblos ancestrales de América, cuestiona las injusticias que se suscitaron en diferentes momentos históricos, pero también muestra la esperanza de un porvenir en el que los pueblos estén hermanados.

Las obras que se podrán ver son pinturas de caballete, dibujos, acuarelas y obra gráfica, representativas de los colores más cálidos en la pintura de Guayasamín. La muestra pone en relieve el mensaje de la serie Mientras viva siempre te recuerdo o La Ternura, a la que él llamaba su “tercera sinfonía”, la cual aborda temas como el amor de madres e hijos, la inocencia de los niños y el amor de pareja como una luz de esperanza para la humanidad. Esta serie estará acompañada de otras obras del artista, por lo que la muestra se ha dado a llamar De la inocencia a la ternura.

Sobre el autor

Oswaldo Guayasamín es uno de los más reconocidos representantes del arte plástico en Latinoamérica; fue declarado Pintor de Iberoamérica por la IX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno en 1999. Ha tenido una estrecha relación de amistad con Argentina y su pueblo.

En 1946 realizó su primera exposición en Buenos Aires, en una muestra colectiva junto con los pintores ecuatorianos A. Palacio y C. Valencia. Posteriormente retornó a la Argentina en varias oportunidades con exposiciones individuales y colectivas en Buenos Aires, Mendoza, San Fernando de Catamarca y General Roca, entre otras ciudades. Ese vínculo se desarrolló y fortaleció con la amistad que mantuvo a lo largo de su vida, con grandes personalidades argentinas de las letras, la música, la pintura y de las artes en general.