Se hizo entrega de los premios a los ganadores del concurso «Volver a las Peatonales»
Organizado por la Municipalidad de Rosario y el Colegio de Arquitectos, el certamen convocó a presentar proyectos para revitalizar el área central con visiones estratégicas de desarrollo urbano.
Este martes se llevó a cabo la entrega de los premios a los profesionales responsables de los proyectos ganadores del Concurso de ideas «Volver a las Peatonales», organizado por la Municipalidad de Rosario, a través de la Secretaría de Planeamiento, junto al Colegio de Arquitectos. El acto tuvo lugar, precisamente, en el cruce de las peatonales Córdoba y San Martín, y contó con la presencia del intendente Pablo Javkin, la secretaria de Planeamiento, Agustina González Cid, y representantes de la institución de profesionales.
“Recogimos un montón de ideas muy buenas de los proyectos ganadores y el próximo paso es ver cómo vamos a implementar esas intervenciones a corto plazo. Porque esta primavera va a ser especial, va a ser una primavera de recuperación, y hay que acompañarla con mejoras que se vean en la vida urbana, y esto lo vamos a tener que construir entre todos”, afirmó el intendente, en el marco de la entrega de los premios.
“Estamos parados en un lugar que representa la vida de la ciudad y que hay que reconstruir, sobre todo después de lo que estamos pasando, una experiencia que va a reconfigurar nuestras vidas, nuestras formas de relacionarnos y de producir”, dijo Javkin, al referirse a las consecuencias sociales y económicas de la pandemia.
“A veces se cuestiona que se atienda el centro, pero el centro no es de los que viven en él solamente, sino un lugar de encuentro colectivo que debe ser amplio, abierto y democrático para todos los rosarinos”, reflexionó asimismo el mandatario, quien estuvo acompañado, además, por las subsecretarias de Turismo, Alejandra Matheus, y de Comunicación Social, Jorgelina Fay.
El objetivo de la iniciativa, que fue lanzada a principios de abril, tuvo como eje diseñar intervenciones de urbanismo táctico en las peatonales de Rosario para revitalizar el área central con acciones ágiles orientadas a la producción de resultados tangibles y experiencias de transformación a corto plazo, además de instalar el debate acerca de cómo poner en valor la calle y el espacio público, de cómo la participación activa de diversos ámbitos de la sociedad es una forma de crear entornos más democráticos, inclusivos y seguros.
Bajo esta premisa, de los 15 trabajos que calificaron para ser evaluados el primer premio correspondió a los arquitectos Diego Arraigada, Leandro Rota y colaboradores; el segundo lugar recayó en el equipo de la arquitecta Carina Mercado y su par Emiliano Güizzo, en tanto el tercer trabajo premiado fue el de Cecilia Carreño y Paula Olea, también profesionales de la arquitectura. Asimismo, la propuesta de la arquitecta Mónica Peccioloni y de los arquitectos Ignacio Cuenca y Guido Picasso recibió una mención honorífica.
En la ocasión, Agustina González Cid indicó que el propósito del concurso de ideas "fue pensar cómo hacemos, con intervenciones rápidas y chicas, de bajo costo, para cambiar la dinámica de la peatonal y hacer que la gente quiera venir, no sólo porque necesita comprar algo sino que para que sea un lugar que convoque, que sea atractivo y haya espacio de uso".
Además, la funcionaria destacó que “todos los centros de ciudad fueron disminuyendo su actividad y Rosario no escapa a esta situación, que se empezó a acentuar con la pandemia”.
Por su parte, la vicepresidenta del Colegio de Arquitectos de Rosario, Gabriela Pantarotto, explicó que esa institución fomenta los concursos y aseguró: "Por eso aceptamos gratamente la invitación de la Municipalidad para revitalizar las peatonales”, a la par que consideró: "Desde el punto de vista urbanístico es muy importante el centro de Rosario, y, como dijo el intendente hace un rato, en realidad el centro es un espacio que usamos todos los rosarinos, de disfrute y de trabajo”.
“Hay que devolverles la vitalidad que siempre tuvieron las peatonales y que, por el propio desarrollo de la ciudad, de la economía y de la pandemia, son espacios que no se están usando. A eso, hay que sumarle el cierre del edificio de La Favorita, que es un golpe fuerte para el centro rosarino”, añadió la profesional.
Cabe señalar que las intervenciones de los proyectos ganadores permitirán la regeneración urbana a una pequeña escala, como un tramo de una calle, una esquina, una plaza, una cuadra, una fachada o un edificio. Y a largo plazo, brindarían la posibilidad de generar cambios, ajustar visiones o criterios de diseño de proyectos en determinadas áreas de la ciudad.
Premiados y justificación
El primer lugar le correspondió al grupo compuesto por las y los arquitectos Diego Arraigada y Leandro Rota (titulares), Constanza Pisano y Juan Cruz Theiler, y las y los estudiantes de arquitectura Franco Brachetta, Lisa Domecq-Cazaux, Sebastián Flosi y Rodrigo Salgueiro.
En su fallo, el jurado sostiene que “instala en el tratamiento del objeto del concurso una postura que, a la luz de la necesidad o conveniencia de operaciones de urbanismo táctico, las trasciende, dirigiendo una mirada profunda hacia las peatonales de la ciudad. Se plantea inicialmente el estado de situación, mediante un acertado diagnóstico sobre las múltiples y variadas causas del deterioro paulatino de las peatonales".
Además, valora que “contendrá y enfatizará las intervenciones de técnicas tácticas, en tanto calificación de la relación figura-fondo. Para ello, el trabajo presenta un detallado relevamiento gráfico de los edificios de valor patrimonial o valorables por otras causas; proponiendo acertadamente su recuperación. Eliminación de inconexas recovas, ordenamiento de cartelerías, supresión de cables aéreos, traslado de los kioscos al interior de los locales, pautas para un equipamiento homogéneo; forman parte de las acciones propuestas".
"El trabajo valora la recuperación del piso de pórfido existente como un gran acierto para un espacio público, más en el contexto de la globalidad de la propuesta, el Jurado lo interpreta como una recuperación del encuentro con el suelo, tanto como lo procura con el cielo, hoy obstaculizado para la mirada del peatón”, agrega en su justificación.
El segundo premio correspondió a la arquitecta Carina Mercado y el arquitecto Emiliano Güizzo. Para el jurado, este trabajo presenta una serie de características que lo destacan entre las propuestas postuladas, ya que “propicia una reconversión del espacio público a través de un dispositivo innovador pero que simultáneamente revisa la producción de la arquitecta italo-brasileña Lina Bo Bardi; pone el eje de la intervención en los intercambios culturales comunitarios y el acceso al patrimonio artístico de la ciudad; se trata de un proyecto efímero, versátil, flexible, adaptable a otros usos, y capaz de mutar para su instalación en diversas locaciones y coyunturas; al ser un dispositivo lumínico su activación propicia la ampliación de la franja horaria de circulación en la zona; su volumen sintético y simétrico interactúa con los peatones sin interferir ni percibirse como un obstáculo; su materialidad”.
A su vez, la propuesta presentada por las arquitectas Cecilia Carreño y Paula Olea obtuvo el tercer lugar, y la misma se destaca, plantea el jurado, por su “detallado trabajo sobre ambos corredores peatonales de la ciudad de Rosario, realizando un pormenorizado estudio de las variantes que se deberían tener en cuenta, una propuesta de cómo poder recorrer y reconectar sus galerías peatonales, un desarrollo detallado de posibles soluciones para su mobiliario urbano, etc., que muestran claramente una buena y acertada intención desde dónde poder abordar la problemática de nuestras peatonales y un camino posible para su abordaje a futuro”.
Por último, la mención honorífica fue para el equipo formado por la arquitecta Mónica Peccioloni y los arquitectos Ignacio Cuenca y Guido Picasso. El fallo sostiene que se trata de un “trabajo disruptivo que valoriza al concurso como un instrumento de opinión, una propuesta que apela a la utopía reformulando las preguntas y resignificando los recursos para instrumentar las respuestas. Una visión simbólica y provocativa con un conjunto de dispositivos de una escala y una geometría que expresan desmesuradamente un escenario radical para re-imaginar el área de la peatonales por completo, con una materialidad que evoca a aquellas naves de helio que surcaban los cielos despertando la atención de todos, con imágenes que invitan a reflexionar a partir de la abstracción; y con una presentación destacable”.
El jurado estuvo compuesto por el subsecretario de Planeamiento, Gervasio Solari; la coordinadora de Colecciones del Museo Castagnino+Macro, Georgina Ricci; el subsecretario de Espacio Público y Respuesta Cercana, Nicolás Mijich (todos de la Municipalidad de Rosario) Carlos Malamud, por el cuerpo de jurados del Colegio de Arquitectos de Rosario) y Alejandro Beltramone, miembro electo por los participantes.
Quienes deseen conocer más detalles de cada trabajo seleccionado, así como sus memorias descriptivas, pueden hacerlo accediendo a este enlace.