26 de noviembre

Seguridad

Control

Importante inversión para la colocación de alarmas comunitarias en los barrios

La Municipalidad de Rosario realizó la apertura de sobres para colocar 229 paneles de alarmas entre los barrios Agote y Azcuénaga. La inversión de 11.5 millones beneficiará a 4580 familias.

Ayer al mediodía se realizó la apertura de sobres correspondiente al proceso licitatorio para la colocación de 159 paneles de alarmas comunitarias en barrio Agote y 70 en barrio Azcuénaga, para los cuales se conocieron dos oferentes. El acto estuvo a cargo de los secretarios General y de Control y Convivencia, Pablo Javkin y Gustavo Zignago, respectivamente.

El equipamiento no representa ningún costo para el vecino, y la totalidad de la inversión corre por cuenta de la Municipalidad representando un total de $11.500.000.

“El sistema de alarmas comunitarias es una construcción conjunta con los vecinos, a quienes ayudamos a organizarse para utilizar responsablemente el sistema y que se traduzca en una mejora para el barrio”, destacó Javkin durante el acto formal que tuvo lugar en el CMD Noroeste.

El proyecto de alarmas comunitarias municipales comenzó a implementarse en septiembre del año pasado en respuesta a los pedidos realizados por los vecinos en el Presupuesto Participativo.

En primer lugar se instalaron 38 paneles en los barrios Las Heras y Roque Sáenz Peña del distrito Sur. Seguidamente, se incorporaronn 19 paneles en Villa Urquiza, barrio del distrito Oeste. Ambas fueron las primeras experiencias de este sistema que lograron beneficiar a más de 2000 familias. A su vez, 12 clubes y vecinales cuentan con esta tecnología instalada en sus predios.

"Estamos satisfechos de participar y contruibuir en la implementación de una herramienta innovadora que ayuda a consolidar lazos sociales y mejorar la seguridad y la convivencia en los barrios", reflexionó Zignago.

La selección de los nuevos barrios Azcuenaga y Agote se debe a que son zonas con un tejido vecinal fuerte, de alta participación y con compromiso de los vecinos que evidencian complejidades en cuanto al desarrollo de los delitos urbanos.

Ellos, entre tantos otros barrios de la ciudad, fueron elegidos para implementar una serie de reformas urbanas preventivas que contribuyen a la seguridad objetiva y subjetiva de los vecinos. Nuevas luminarias, despeje de espacios públicos, nuevas paradas de transporte urbano, mejor coordinación con policía y organismos de control y por último, equipamiento de seguridad preventiva como las alarmas comunitarias.